Oscar Cabezas, from UBC’s Department of French, Hispanic, and Italian Studies, recently gave a lecture to a “massive attendance” (with a video feed to an overflow hall) at the Universidad Arcis, in Santiago de Chile.
A report on his talk (taken from the university website) follows:
Masiva asistencia de comunidad arciana en conferencia Comunismo ¿Hoy?
Martes, 17 de Mayo de 2011 16:33 PRENSA
En una sala Jorge Müller colmada de estudiantes, académicos y directivos, que obligó a habilitar una transmisión televisada en una sala conjunta, se realizó la conferencia Comunismo ¿Hoy?, organizada por las escuelas de Antropología, Ciencia Política y Sociología de Universidad de Arte y Ciencias Sociales, ARCIS, que contó con la exposición del sociólogo de nuestra Casa de Estudios Superiores y académico de la University of British Columbia, Oscar Cabezas.
En la actividad, que tuvo entre sus asistentes al Rector Carlos Margotta, y a las principales autoridades de Universidad ARCIS, Cabezas señaló su agradecimiento por la invitación, sobretodo para abordar el comunismo hoy, “considerando al comunismo como la negación de la mercantilización capitalista y en contra de la falta de coraje de la universidad mercantil que proscribe la esencia misma de la universidad. Es decir su relación con el pensamiento crítico y con la tradición de todos aquellos que han pensado la emancipación como un problema del presente, y por lo tanto han pensado el comunismo como aquello que constituye la esencia misma de una alternativa que no ha tenido lugar”.
Agregó, en otro momento de su lectura, que “si el comunismo ha sido el significante reprimido del debate teórico y político, es precisamente porque es el nombre de los sin nombre, el nombre de las masas anónimas, que contra las lógicas unitarias de los Estados y de los partidos de los Estados se contienen, se reprimen”.
En su reflexión Cabezas, citó también el texto del filósofo francés Alain Badiou, para hacer referencia a lo que históricamente a la idea de comunismo, leyendo la siguiente cita: “La palabra ‘comunismo’ ha sido durante aproximadamente dos siglos (desde la Comunidad de los Iguales de Babeuf hasta los años ochenta del último siglo) el nombre más importante de una idea situada en el campo de las políticas de emancipación o políticas revolucionarias. Sin duda, ser un comunista era ser un militante de un Partido Comunista en un país determinado. Pero ser un militante de un Partido comunista era ser uno de los millones de agentes de una orientación histórica de la Humanidad entera”.
Por último Cabezas manifestó que lo “heroico de la idea del comunismo hoy, y del comunismo hoy en ARCIS, debe ser aquello que se compromete con el arte de lo imposible, y así jamás con el arte de lo posible, cuya traducción es la complicidad con la articulación hegemónica de los consensos”.
A continuación comentó la conferencia de Cabezas, el académico de Universidad ARCIS, el Doctor en Filosofía Federico Galende, quien señaló que le parecía importante como primer aspecto decir que en el texto de Cabezas hay cuatro puntos que han recorrido y siguen recorriendo las aulas de esta universidad y del país, y que son la idea del comunismo como fantasma, como provenir que oscila, como relámpago y como potencia. Agregando que le parecía importante señalar también que el texto de Cabezas aludía de manera muy clara a esa discusión entre un comunismo como una idea predeterminada y aquella que se construye día a día, o como aquello que el proletariado debe asumir y hacer, versus la idea de aquello que se puede ensanchar y complejizar.
Finalmente el también académico de Universidad ARCIS, el profesor de Estado en Física, Carlos Pérez entregó su reflexión sobre la conferencia de Cabezas, partiendo por señalar su alegría por estar de acuerdo con lo que este había planteado, y agregó que “estaban mucho más de acuerdo que hace diez años”. Explicando que es lo que pasa con las modas, que son un péndulo, y que hoy esta de moda el venir de vuelta y señalar, por ejemplo, que el comunismo es un impulso ético, que es una lucha por la justicia, aclarando Pérez que para él “el comunismo en Marx no es sólo un impulso ético, es ensuciarse las manos… es algo mucho más práctico, es buscar terminar con la lucha de clases”.